¿Qué es un fondo cotizado (ETF)?

Los fondos cotizados, conocidos como ETFs por sus siglas en inglés (Exchange-Traded Funds), son una herramienta de inversión que se comercia en bolsas de valores, similar a como se compran y venden las acciones. Cada ETF posee una colección diversificada de activos (como acciones, bonos, o commodities), y al comprar una participación en un ETF, el inversor adquiere una porción de esta cartera diversificada.
Índex
Características de los fondos cotizados (ETF)
- Diversificación: un solo ETF puede incluir cientos de valores, lo que ayuda a dispersar el riesgo.
- Liquidez: al cotizar en bolsa, se pueden comprar y vender participaciones de ETF durante el horario de mercado a precios de mercado en tiempo real.
- Transparencia: los ETFs suelen revelar su cartera diariamente, ofreciendo claridad sobre en qué estás invirtiendo.
- Eficiencia fiscal: generalmente, los ETFs tienen un menor impacto fiscal comparado con otros productos de inversión.
Ventajas
- Accesibilidad: los ETFs permiten a los inversores acceder a mercados y sectores específicos con facilidad.
- Costes Bajos: los ETFs suelen tener menores costos de gestión en comparación con los fondos de inversión tradicionales.
- Flexibilidad: se pueden comprar y vender como acciones en cualquier momento durante el día de negociación.
- Diversificación: facilitan la diversificación del portafolio incluso con una inversión relativamente pequeña.
- Simplicidad: son fáciles de entender y comprar, lo que los hace ideales para inversores principiantes.
Desventajas
- Costos de transacción: comprar y vender ETFs incurre en comisiones de corretaje como las acciones.
- Riesgo de mercado: al igual que cualquier inversión en el mercado, están sujetos a la volatilidad del mercado.
- Riesgo de liquidez: algunos ETFs, especialmente los que siguen mercados o sectores nicho, pueden tener menor liquidez.
- Desviación del índice: los ETFs que replican índices pueden no hacerlo perfectamente, lo que resulta en una desviación del rendimiento del índice.
- Sobrecarga de opciones: la gran cantidad de ETFs disponibles puede ser abrumadora para algunos inversores.
¿Qué diferencia hay entre un ETF y un fondo de inversión?
La principal diferencia radica en cómo se compran y venden:
- Los ETFs se negocian en bolsas de valores y su precio varía durante el día.
- Los fondos de inversión se compran y venden al final del día a un precio fijo, el valor liquidativo del fondo.
Tipos de fondos cotizados (ETF)
- ETFs de acciones: invierten en carteras de acciones, ofreciendo una amplia diversificación.
- ETFs de bonos: permiten invertir en el mercado de deuda con diferentes estrategias.
- ETFs de sectores: se centran en un sector específico de la economía, como tecnología, salud o energía.
- ETFs de materias primas: invierten en recursos naturales como oro, petróleo o granos.
- ETFs internacionales: proporcionan exposición a mercados fuera de tu país de residencia.